El DMAE, también conocido como dimetilaminoetanol, es una molécula muy pequeña, por lo que penetra muy bien, análoga de la colina, ayuda a estimular al músculo que, cuando nos vamos haciendo mayores, va dejando de contraerse. El DMAE es esa energía para los músculos faciales. Resulta efectivo siempre combinado con otros productos y teniendo en cuenta que no es efectivo para resolver una flacidez muy acentuada.
Mejora de la firmeza de la piel: Se ha sugerido que la DMAE puede tener propiedades que favorecen la producción de colágeno y elastina, proteínas que son fundamentales para la firmeza y elasticidad de la piel. Esto podría contribuir a reducir la apariencia de la flacidez cutánea.
Reducción de arrugas y líneas finas: Algunos estudios sugieren que la DMAE puede ayudar a disminuir la apariencia de arrugas y líneas finas, posiblemente mediante la estimulación de la contracción muscular y la mejora de la tonicidad de la piel.
Propiedades antioxidantes: La DMAE también se ha asociado con propiedades antioxidantes, lo que significa que podría ayudar a combatir los radicales libres responsables del envejecimiento prematuro de la piel.
Mejora de la luminosidad: Se ha sugerido que la DMAE puede contribuir a mejorar la luminosidad de la piel, lo que podría proporcionar un aspecto más saludable y radiante.
El DMAE es un ingrediente eficaz si se emplea de forma continuada, y se combina en la rutina con otros cosméticos. Por ejemplo con transformadores como los retinoides o alfahidroxiácidos por la noche, o antioxidantes y antipolución como la vitamina C, ácido hialurónico y ceramidas por la mañana
Sus beneficios van mejorando durante los seis primeros meses y, como es acumulativo, pueden notarse incluso ocho semanas después de la última aplicación.